Poesía reciclada.

Es mi mente
un vertedero,
en el que
desde hace ya bastante tiempo,
se vienen posando en mi mente,
palabras, recuerdos e ilusiones.

Es mi mente
un vertedero
de recuerdos e ilusiones,
que nunca jamás
habitaron o existieron.

Es mi mente
un vertedero
en donde,
llegan las palabras
a enormes plantas de reciclaje,
donde, diminutos duendes,
que sobrevivieron a los
ríos de tinto y wishkey,
las juntan,
como buenamente pueden.

Así llego a obtener esta sustancia,
de basura reciclada,
que aunque la vista de seda,
mierda se queda.

Me levanto,
como cada mañana,
los ojos encharcados en lagañas,
los pelos revueltos,
entre recuerdos de la noche anterior.

Me asomo a la ventana,
¡a buenas horas!,
grita el sol que se encamina
a fichar para salir,
y notando el último regusto
del vino en mi gaznate
cojo la ropa que se amontona
anárquicamente en la silla,
desde tiempos inmemoriales
y me visto.

Aun huele a jumarra de la noche anterior,
fragancia de bar que siempre me acompaña,
huele a risas,
a amigos,
a tabaco... y otras hierbas que os podéis imaginar.

Así me encamino de nuevo hacia los bares de siempre,
a veces me pregunto...
no seria más fácil poner las camas allí,
y apenas recién levantado,
vuelvo al sitio donde me perdí,
la noche anterior,
entre jarras,
           humo
              y amigos.

Pena no fuera siempre así,
solo me queda,
aprovechar estos escasos momentos,
antes de extraviarme,
otra vez,
en la inmensa jungla,
de despertadores,
madrugones,
y sueños por cumplir.

Apreton Instestinal

Sucede que,
desde hace ya un tiempo,
me levanto todas las mañanas,
esas que empiezan a medio día,
Cuando el estomago te arde,
por el veneno ingerido
durante la noche anterior,

y entonces es,
cuando sientes dentro de ti,
esa fuerza incandescente,
escuchas a la madre naturaleza,
vociferando a tu puerta,
¿a quien no le ha pasado?

sin pensarlo, salto apresuradamente,
recorro la habitación buscando el periódico,
porque, no es comparable,
y no lo duden señores,
el placer de haber defecado,
con el de restregar,
contra tu ano,
la cara del presidente
y sus estúpidas banderas,
sentir el áspero raspar,
del bigote de algún dictador,
y así, si aun todavía no he terminado,

consigo un perfecto acabado,
tras haberme refrotado concienzudamente
de arriba abajo y de abajo arriba,
repartiendo mi chocolate,
entre todas y cada una de las caras,
de esos a los que llaman,
la ''familia real''

y dejando al ''rey'',
un poquito más moreno,
equiparable a baltasar,
tiro de la cadena,
viendo como en un continuo e infinito girar,
las tuberías se tragan
toda la esa mierda,



 la de mi cuerpo,

                y la de la sociedad.

                                                                  Txus









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Asi declaro estrenado el blog

opiniones, criticas y demas pensamientos sean bienvenidos.

un saludo =)